08:20 AM / 19/10/2017-Ana Padrón (Pasante)
Agencias
La hiperactividad infantil es un trastorno muy frecuente en los niños que afecta comúnmente al 3% de los niños menores de 7 años, ellos poseen una inteligencia normal o incluso superior a la media aunque para la mayoría de los niños que la padecen les cueste mantenerse concentrado. La hiperactividad es causada por factores biológicos, su origen se presenta en la neurología y genética específicamente en los genes que participan en la construcción y funcionamiento del cerebro humano.
Los niños con hiperactividad, poseen unas características específicas que son señales al momento de diagnosticar este trastorno. ¡Conócelas!
Mueven en exceso las manos o los pies, esto suelen hacerlo muy a menudo, como también, mover el asiento en el que están.
Abandonan su asiento en clases constantemente o en otro lugar donde es necesario que permanezcan sentados.
Corren o saltan excesivamente en situaciones que se considera inapropiado y en el lugar incorrecto.
Tienen dificultad para jugar o dedicarse con tranquilidad a alguna actividad la mayor parte del día.
Suelen actuar como si tuviera un motor (constante marcha), no se queda tranquilo en ningún momento.
Hablan en excesos y en todo tiempo.
El trato de los padres y de los maestros a los niños hiperactivo, debe ser correcto para poder tratar fácilmente con su personalidad sin herirlo. La psicóloga Wuillianny Chirinos, te enseña cómo debes actuar ante la comunión con el niño hiperactivo:
1. Los padres deben constantemente dirigirse a los especialistas (psicólogo y neurólogo) para la correcta evaluación.
2. Deben los padres estar atentos al momento de la detección para que este diagnóstico sea a temprana edad.
3. Padres, es necesario que puedan psico-educarse en relación a lo que genera el diagnostico en su hijo y como impacta su conducta.
4. Es tarea de los padres con ayuda de un especialista trabajar en métodos para la modificación de conductas.
5. Ayudarlos en su entrenamiento en auto-control.
6. Los maestros en clases deben estar consciente que no es posible rediseñar al niño para que no sea hiperactivo.
7. La actitud de los maestros frente al niño debe ser cambiada, para que él no se sienta rechazado.
8. Los maestros deben tener presente que es importante traer siempre a memoria que el comportamiento del niño no es porque es malcriado o no tiene límites.
9. Es tarea de los maestros estar atentos de lo que más estimula al niño dentro del salón de clases.
“Toda la familia y quien rodea al niño, debe conocer bien en qué consiste la hiperactividad. Tener presente la constancia en el tratamiento que el niño requiera y a su vez, ser soporte emocional para que el niño se sienta bien. No deben olvidar identificar cuáles son las situaciones que estresan o estimulan al niño y mantener una actitud positiva frente a él para que el niño no se sienta frustrado”. Recomendó la especialista en Psicología de la Salud a todos aquellos padres y maestros que tienen cerca a un niño con hiperactividad.
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