Belleza y Salud
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miércoles 02 de abril de 2014 10:25 AM
Manten tu memoria en pleno rendimiento siguiendo estas cinco recomendaciones publicadas en el portal Bazar España.
Usa otra fuente. Estás acostumbrada a leer en Times, en Cambria o en Helvética en los archivos de la computadora. Dificulta un poco la tarea utilizando otro tipo de fuente y obligarás a tu cerebro a realizar un pequeño esfuerzo extra sin darte cuenta.
- Utiliza la mano izquierda. O la derecha, si eres zurdo. Obligarte a realizar actividades cotidianas como lavarte los dientes, dar vueltas al café o abrocharte el cinturón con la mano que menos controlas estimulará partes de tu cerebro que permanecían sin utilizar.
- Escribe a mano. Sí, resulta que el método tradicional es mucho más útil a la hora de retener la información. Esto se debe a que escribir en papel activa partes del cerebro que no necesitamos a la hora de escribir utilizando un teclado.
- Lee en voz alta. Sabemos que hace años que no lo haces, pero leer en voz alta obliga a utilizar más partes del cerebro que la lectura en silencio.
- Haz descansos. Da igual que estés estudiando o en el trabajo. Tómate pequeños tiempos reales, porque es mucho más fácil recordar lo vivido hasta el momento con esos parones que después de jornadas sin descanso.
Usa otra fuente. Estás acostumbrada a leer en Times, en Cambria o en Helvética en los archivos de la computadora. Dificulta un poco la tarea utilizando otro tipo de fuente y obligarás a tu cerebro a realizar un pequeño esfuerzo extra sin darte cuenta.
- Utiliza la mano izquierda. O la derecha, si eres zurdo. Obligarte a realizar actividades cotidianas como lavarte los dientes, dar vueltas al café o abrocharte el cinturón con la mano que menos controlas estimulará partes de tu cerebro que permanecían sin utilizar.
- Escribe a mano. Sí, resulta que el método tradicional es mucho más útil a la hora de retener la información. Esto se debe a que escribir en papel activa partes del cerebro que no necesitamos a la hora de escribir utilizando un teclado.
- Lee en voz alta. Sabemos que hace años que no lo haces, pero leer en voz alta obliga a utilizar más partes del cerebro que la lectura en silencio.
- Haz descansos. Da igual que estés estudiando o en el trabajo. Tómate pequeños tiempos reales, porque es mucho más fácil recordar lo vivido hasta el momento con esos parones que después de jornadas sin descanso.
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