Capturados. Cinco mujeres y dos hombres son investigados por integrar una red de trata que ofrecía servicios sexuales de mujeres menores de edad.
La Fiscalía General de la República (FGR) informó que las menores eran atraídas “con la promesa de ofrecerles trabajos para actividades relacionadas con la publicidad y el modelaje”.
Según las autoridades, las víctimas eran ofrecidas como mercancía y por cada una de ellas los imputados cobraban entre $50 y $100, “dependiendo del tipo de cliente”. Esa cifra se podía elevar hasta los $300, si los clientes pedían una víctima “virgen”, según detalló la Fiscalía.
Entre los clientes, según la Policía, había “docentes, académicos y profesionales”. “Todavía tenemos pendiente otra fase (de investigación)”, explicó de manera escueta el jefe de la División Central de Investigaciones (DCI) de la Policía, José Guerra Martínez, quien confirmó que hay 17 personas detenidas como sospechosas de esta estructura.
El jefe de la DCI reveló, además, que algunas de las víctimas de la red luego se convirtieron en tratantes. También confirmó que la Fiscalía ha concedido criterio de oportunidad, es decir, beneficios penales a cambio de su declaración a cuatro de los implicados.
La investigación a esta estructura de trata inició en septiembre de 2011, según informó la DCI. Estas capturas corresponden a la tercera fase de la investigación. En noviembre del año pasado, durante la segunda fase de investigación, fueron detenidas ocho personas, que están siendo procesadas en el Juzgado Noveno de Instrucción de San Salvador.
Smirna de Calles, jefa de la Unidad de Tráfico Ilegal y Trata de Personas de la Fiscalía, señaló a David Armando Pérez Bonilla, de 22 años, como cabecilla de la estructura. Pérez, según la FGR, ofrecía los servicios sexuales de las víctimas a sus clientes.
Los otros detenidos son Brigitte Estefani Mejía Quán, de 20 años; César René Merino Morán, de 22; Karla Yamileth Iraheta, de 27; Estela Lourdes Castillo Cortez, de 22; Karla María López Fuentes, de 23; y Yeni Rosibel Ramírez Arévalo, de 23. Otras cuatro personas, ya recluidas en Cárcel de Mujeres, fueron informadas (intimadas) de la acusación en su contra.
La red de trata basaba sus operaciones en los principales centros comerciales de San Salvador. “Ahí hacían el perfilamiento de las víctimas, las seleccionaban y (también) era el punto de entrega y de comunicación para entregarlas a las personas que usan estos servicios”, dijo el jefe policial.
Además de las capturas, la PNC realizó 10 allanamientos en los que incautó “celulares, chips, agendas, datos de clientes y tarjetas” en 10 allanamientos.
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