Delsy Fernández
Una explosión ocurrió el pasado 20 de enero en la casa de la familia /Foto: Miguel Romero
Roselys López luchó por su vida 8 días. El deceso de su esposo ocurrió este martes 29 de enero dos horas antes que ella falleciera. Tenía hepatitis. El bebé de ambos, de 8 meses, murió 2 días después de la explosión de la casa.
Tristeza. Esa es la palabra que mejor describe la verdadera tragedia por la que atraviesa la familia Torres López.
Ayer en horas de la mañana falleció Roselys Paola López Chaparro (22) , la madre quien resultó herida en la fuerte explosión de su casa, ocurrida el pasado 20 de enero en Ciudad Lossada.
El destino decidió que la familia completa partiera al cielo, pues parientes de la víctima confirmaron que horas antes, este mismo martes, su esposo Pedro Torres Peñaranda también había fallecido.
El deceso del marido no fue a consecuencia de esa terrible explosión. Torres Peñaranda dio la batalla por su vida casi un mes dentro de un recinto hospitalario, a donde lo llevaron por un severo cuadro de hepatitis.
Con la muerte de los esposos se eleva a tres el número de víctimas que lloran en Ciudad Lossada, pues el día del estallido de la vivienda familar junto a Roselys resultó herido Santy Andrés Torres López, de apenas 8 meses de nacido. Santy era el hijo de la pareja y falleció dos días después del hecho a consecuencia del 60% de quemaduras de segundo grado que presentó.
Alexander Chaparro, tío de Roselys, manifestó ayer, a las afueras de la morgue forense de LUZ, que su sobrina estaba respondiendo bien al tratamiento que se le administraba en el Hospital Coromoto a donde fue llevada luego del suceso, pero “no pudo soportar la pérdida de su hijo, todos los días se preguntaba por qué había ocurrido eso y decía que se quería morir”.
Chaparro expuso que son una familia que no cuenta con los recursos económicos para darle sepultura a la mujer y que aunado a esto los trámites se le han ido cuesta arriba, pues Roselys jamás fue presentada. “No tenía papeles, estaba indocumentada”.
El 20 de enero pasado, la fuga de gas en el complejo habitacional de Ciudad Lossada originó una explosión que destrozó la vivienda de la familia por completo al igual que la de Mario Fernández, vecino del piso de abajo.
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