Andrés Hernández Mendoza
AFP
Un batazo de foul que impactó a una niña en el Minute Maid Park, casa de los Astros de Houston destapó el lado más sensible del pelotero norteamericano Albert Almora Jr. El hecho ocurrió el pasado miércoles en el partido entre los Cachorros de Chicago y el equipo sideral cuando un batazo de foul por los predios de la tercera almohadilla impactó de lleno a una niña que estaba como fánatico en el parque de los cohetes.
De acuerdo a los primeros registros de estadísticas de las Grandes Ligas el pelotazo salió del madero a más de 100 millas por hora siendo un golpe bastante salvaje que lastimosamente impactó en la humanidad de la pequeña, afortunadamente los primeros auxilios del estadio asistieron inmediatamente a la pequeña que indicó que estaba consciente y hablando.
Ya cuando regresó al terreno de juego una entrada más tarde, Almora Jr. no pudo contener el llanto después de hablar con la encargada de seguridad que se encontraba muy cerca del accidente.
De nueva cuenta Javier Báez y Jason Heyward se acercaron para consolar a su compañero.
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