El fin de semana del 26 y 27 de agosto se celebraron los Ejercicios Cívico Militares en respuesta a la subida de la apuesta de Estados Unidos contra la Venezuela Bolivariana. Esta galería registra alguno de los momentos de la más reciente manifestación de respuesta ante esa convocatoria.
Lo menos importante, a la hora de establecer areas de importancia, es lo que se entiende como el lado de demostración pública que entrañan las acciones militares de los Ejercicios: lo más importante, en contrapartida, lo es la movilización interna, el ejercicio voluntari de asumir un deber (que no es otra cosa que uno de los contrapesos necesarios en el ejercicio de la libertad). El clarín, el llamado, y quien calla. él
Comprendamos, es de defensa integral no por antojo discursivo: en estado de guerra, el país debe funcionar, debe mantenerse vivo, debe proteger su propio aparato circulatorio, ahí donde palpita vivo la esencia de lo que se defiende.
Y esta no es una observación caprichosa: gran parte de los ejercicios tuvieron como prioridad el funcionamiento ante el peor escenario de todos los componentes esenciales de la política social, el cómo se revisa hasta su mínima expresión la defensa de todos los puntos críticos, comenzando por quienes, desde las misiones y otras áreas fundamentales del estado chavista y fuera de él (los Clap) hacen lo propio ante el más peligroso de los paisajes: la guerra abierta.
Un ejército marcha sobre su estómago, diría Napoleón Bonaparte, pero también un país que se defiende marcha sobre su corazón y sobre la suma de sus entrañas.
La miseria total en el discurso (algo tan endémico a la reacción ante la primera movilización) y la burla sin talento no es más que un acto reflejo producto del consumo ninfo del (mediocre) cine bélico factura joliwud que cretiniza cualquier idea sobre qué es en realidad un ejército y qué significa proteger la paz. Lo que le sucede a quienes ante la evidencia ignoran que habitan un país que de verdad se vive y se defiende. El ser suelo natal.
Del mismo modo que quienes, bajo una mediocrización del guevarismo o un exceso de Silvio Rodríguez mal llevado poetizan la guerra y creen que Vietnam fue sólo llama heróica y no un sacrificio casi indecible por la carga de dolor y absurdo que entraña el enfrentar el absurdo de la guerra.
Se mueve otra vez, de manual, el mapa nacional, y ya no es la "protesta pacífica", sino la fase armada, la opción militar bajo la sombra que se concentra en un especulador inmobiliario que hoy como presidente gringo asoma "la opción militar". Ahí, junto a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, se vio el personal que el 30 de julio votó por la paz política de la nación.
"Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende", escribió El Libertador en 1818 al agente del gobierno estadounidense John Irvine, a propósito de la provocación de dos embarcaciones gringas que temerariamente se asomaron en las bocas del Orinoco, para luego retirarse sin pena ni gloria.
Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende
Por eso los perros disminuidos a la nada ladran su balbuceo muerto, o callan.
Este trabajo fotográfico fue realizado por Rosana Silva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario