"El periodista debe conocer cómo funcionan las redes para sacarle provecho, para tener un máximo de eficacia", advierte Roberto Hernánez Montoya / Estamos viviendo una revolución muy profunda que yo la relaciono únicamente con la aparición del alfabeto y la imprenta
Caracas 27 de junio de 2015.- Hoy es difícil casi imposible sin ellas. El potencial enorme que poseen las llamadas redes sociales digitales para la publicación inmediata de contenidos, su interactividad y versatilidad, las convierten en un lugar extraordinario para el surgimiento del llamado periodismo 2.0… Las redes sociales (RRSS) son hoy una de las principales herramientas utilizadas por los profesionales de la comunicación, ya que sirven, no sólo para la publicación de contenidos (textos, audios, videos) cada vez más cercanos e inmediatos, sino que se van convirtiendo en fuentes.
La Red cada día que pasa ofrece incontables espacios para publicar contenidos, todos disponibles para todos… y, por supuesto, para los periodistas; siendo así, es innegable que la comunicación, y por tanto el periodismo, vive una gran revolución que ha permitido que la profesión periodística evolucione, se reinvente y se adapte, con agilidad y rapidez.
El licenciado en Letras, escritor y actualmente Director del Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos (Celarg), Roberto Hernández Montoya, habló de sus impresiones sobre el uso de las RRSS en el periodismo, esto a propositito de la celebración del Día del Periodista.
¿Es el denominado periodismo 2.0, el periodismo del presente o del futuro?
RHM.- Yo creo que es el presente, el futuro es ya; no sé qué va a pasar más adelante, pero lo que veo en estos momentos es que la gente puede reportar directamente lo que está pasando a través de las redes sociales. Yo siempre leo a un francés que vive en damasco y que informa constantemente lo que está pasando, a través de él me entero de cosas que en los medios tradicionales no se dicen.
Las redes sociales dan a cada persona la posibilidad de convertirse en reportero
Desde mi punto de vista, para el periodista, el desafío no son estas nuevas herramientas; el desafío del periodista es la ética, que está siendo vulnerada constantemente por los grandes aparatos periodísticos.
Las redes sociales dan a cada persona la posibilidad de convertirse en reportero, eso es algo muy valioso, algo que ha causado, por cierto, que algunos intelectuales escriban contra eso, porque dicen que hay muchos estúpidos en las redes, yo a eso le respondo que estúpidos hay en todos lados, precisamente entre los intelectuales están los estúpidos más grandes que yo he conocido en toda mi vida. De modo que eso no es ningún problema, el asunto es que algunos están sintiendo celos porque se les está metiendo el pueblo en las redes, y si crememos en la democracia no podemos quejarnos de eso.
¿Cómo ha cambiado el internet y las redes sociales la forma de hacer periodismo? ¿Son estas nuevas tecnologías un aliado o un enemigo?
RHM- Yo creo que no debemos verlo como un enemigo. Resulta que el periodismo es una actividad que no requiere de un entrenamiento extremo como en la medicina, porque se puede correr peligro muy grave si una persona se pone a operar a otra sin entrenamiento (…) En el caso del periodismo no, porque la información la tenemos todos y todos podemos trasmitirla sólo que el periodista tiene más experiencia, mayor formación y tiene más ventaja en eso que los demás, es como el deportista profesional al lado del deportista aficionado, el profesional siempre va a tener ventaja, pero no puede negar el derecho que tiene el aficionado de practicar deporte. En definitiva, las nuevas tecnologías no son un enemigo para el periodista.
Las nuevas tecnologías no son un enemigo para el periodista.
El periodista debe leer mucho, debe leer de todo; una máxima, el periodista es un curioso profesional, es una persona que constantemente está investigando, averiguando, buscando la verdad, qué fue lo que paso realmente para trasmitirlo, para analizarlo, para tener un bagaje que le permita ejercer su oficio mejor. Yo creo que eso con internet es algo que se facilita mucho, antes para estar informado sobre muchas cosas era muy difícil, ahora cualquiera está informado de cualquier cosa.
El humor en las RRSS
RHM.- Las redes sociales están llenas de humor, desde el principio, es algo que parece que estuvieran juntos. Por su puesto que nos vamos a encontrar con chistes malos, hay gente que tiene gracia y otras que no (…) y en internet eso se nota mucho… yo he leído algunos muy buenos en internet; también algunos que son muy malos.
¿Se aprovecha todo el potencial de las redes sociales?
RHM.- Yo creo que todavía falta, creo que estamos aún en la estupefacción de esto nuevo que paso, yo sospecho que no la estamos utilizando al máximo. Siempre estoy pensando en cosas que se podrían hacer. Siempre estoy pensando en cosas nuevas que se pueden hacer, algunas veces digo algunas ideas, para ver si algún programador las tomas y las aplica.
¿En el periodismo 2.0 están reñidas la ética, la calidad y la inmediatez?
RHM.- No, son cosas que se deben alimentar una a la otra. La calidad en la información debe tener su mejor aliado en la prontitud. La información como dice la constitución debe ser veraz y oportuna, creo que eso es fundamental.
Las etiquetas que dominan en Twitter son las etiquetas revolucionarias
¿Cómo se imagina que sería el periodismo actualmente si no existieran las redes sociales?
RHM.- Sería como era hace 20, 30 años, el periodismo tradicional que conocimos, que no era malo. Era lo que había, y la única forma de uno informarse de ciertas cosas era asistiendo a una biblioteca a leer los periódicos, buscando prensa especializada. Era el único modo, era engorroso, lento, muy limitado, pero era el que había.
Pero a partir de allí, del desarrollo de ese proceso de investigación, de formación, aparece Internet como una consecuencia directa y lógica. Lo que yo no me explico es por qué no apareció antes.
¿Cómo califica en Venezuela el uso de las redes sociales?
RHM.- Está pasando una cosa interesante en las redes, a pesar de que según las estadísticas, sectores de la oposición tienen mas acceso a las redes, el movimiento revolucionario ha tenido una acción, un movimiento tan grande en Twitter y en las redes en general, que en estos momentos la esta dominando ( es la apreciación que yo tengo), no soy analista del asunto, pero me da la impresión de que las etiquetas que dominan en Twitter son las etiquetas revolucionarias, a pesar de los robots que ellos (La oposición) utilizan.
El Chavismo, posiciona incluso hasta cuatro etiquetas simultáneamente, etiquetas muchas veces promovidas espontáneamente.
Chávez prendió esto del Internet, de Twitter
¿Hay un criterio unificado, comunicacionalmente hablando, para contrarrestar las mentiras que se dicen a través de las redes sobre Venezuela y la Revolución Bolivariana?
RHM.- Lamentablemente no, yo creo que a pesar de que en estos momentos estamos años luz de lo que fue la política comunicacional de hace 10 años por ejemplo, cuando la derecha dio un golpe; que teníamos un solo canal de televisión con equipos viejos (VTV), a pesar de que hoy tenemos muchos canales y todas estas cosas, aún falta una política internacional de defensa de la Revolución, porque hasta por el cielo de la boca nos están dando, sobre todo en EEUU y España, donde el periodismo de las corporaciones se dedican a sembrar informaciones como verdades, y como nadie le lleva la contraria a esta gente, entonces esta mentira se instala, se crea lo que yo llamo la ilusión de unanimidad. Eso es una cosa que está pasando y yo creo que el gobierno venezolano tiene que afrontarlo, lo más pronto posible.
Deberíamos organizarnos, por allí aparecieron varios grupos de usuarios chavistas de Internet, que han hecho un trabajo bien interesante en ese aspecto. Lo que ha hecho el presidente Maduro de tuitear, en inglés y francés entre otros idiomas, es muy importante. Yo creo que es necesario que podamos hacer eso, que utilizamos todas estas herramientas.
El comandante supremo Hugo Chávez, como promotor del uso de las tecnologías y las redes sociales
RHM.- Chávez fue un promotor de muchas cosas, como buen líder, de esos líderes históricos, casi que bíblicos que aparecen de vez en cuando. Chávez se adelantó a muchas cosas que hoy estamos comenzando a ver, por ejemplo, si uno lo oye en las grabaciones de hace años, pareciera que estuviera hablando esta mañana. Pero él tenía una capacidad de adentrase en el entramado social histórico.
Chávez prendió esto del Internet, de Twitter, él lo vio y rápidamente captó cual era la idea, sin ser un experto. Él lo dijo: “tenemos que conquistar las redes” y todos nos metimos. Yo me había metido en Twitter antes para evitar que otro usara mi nombre, pero no usaba esa cuenta, hasta que Chávez convocó y activé la cuenta hasta hoy que estoy metido en Twitter prácticamente todos los días.
Los periodistas están viviendo una época de oro
¿Cuál sería el kit básico para el periodista digital?
RHM.- Es necesario que nos armemos como los caballeros. Tenemos que armarnos de todos esos recursos, de videos, audios, textos, de redacción, herramientas del lenguaje sistemático, eso debemos aprender, porque estamos corriendo peligro. Toda esa campaña mundial multimillonaria que nos están aplicando. Todos tenemos que dar esta pelea, lo que llamó Chávez, la batalla de ideas.
Hay que meterse en todas las redes, en la medida de lo posible, estamos viviendo una revolución muy profunda que yo la relaciono únicamente con la aparición del alfabeto, de la imprenta. Internet ha sido una cosa fantasmagórica.
Así como el periodista sabe cómo abordar una noticia, como redactarla. Ahora también tiene que conocer cómo funcionan las redes para sacarle el máximo provecho, para tener un máximo de eficacia.
A los periodistas:
Los periodistas están viviendo una época de oro
RHM.- Yo creo que los periodistas están viviendo una época de oro, tienen la oportunidad de hacer cosas extraordinarias, de competir con medios que antes eran simplemente invencibles, inabordables; ahora yo puedo meterme a crear mi propio instrumento de comunicación, eso impensable hace algunos años atrás. JB
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