> El expresidente de la cámara de diputados fue arrestado en Brasilia por la Policía Federal > Fue vértice y motor del golpe contra Dilma Rousseff
El expresidente de la Cámara de Diputados de Brasil Eduardo Cunha fue detenido ayer en Brasilia por la Policía Federal (PF) tras cumplir una orden librada por el juez a cargo de la operación.
Cunha, cuyo mandato fue cesado hace poco más de un mes por la cámara baja (que lo encontró culpable de mantener una conducta incompatible con el decoro parlamentario) fue trasladado en un avión de la PF a la ciudad de Curitiba, donde son conducidas las investigaciones de Lava Jato, instruidas por el juez Sergio Moro, refiere Prensa Latina.
Además de la detención del ahora reo, fue dispuesto el bloqueo de sus cuentas y bienes que totalizan más de 220 millones de reales (alrededor de 68 millones 750 mil dólares).
Al solicitar la prisión del parlamentario, y uno de los considerados hombres fuertes del gobernante Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), del presidente Michel Temer, los fiscales alegaron que su libertad suponía un riesgo para la instrucción del proceso.
Consideraron que existía una posibilidad concreta de fuga, en virtud de que éste dispone de recursos ocultos en el exterior y también posee doble nacionalidad: brasileña e italiana.
El pasado lunes, el juez Moro exigió a Cunha presentar en un plazo de 10 días su defensa previa en el caso donde es reo por recibir sobornos millonarios al intermediar en la compra de un campo petrolero en Benin, África, por parte de Petrobras, así como por utilizar sus cuentas en Suiza para lavado de dinero.
Vértice y motor de la alianza golpista que derrocó a la presidenta constitucional Dilma Rousseff mediante un proceso de impeachment, el otrora todopoderoso diputado evangélico fue enjuiciado por mentir a la Comisión Parlamentaria de Investigación de la estatal Petrobras sobre la tenencia de cuentas en el exterior, las cuales negó.
En mayo pasado, el Supremo Tribunal Federal (STF) lo apartó de su cargo en el Legislativo atendiendo un pedido del procurador general Rodrigo Janot, quien lo acusó de destruir pruebas, presionar e intimidar víctimas y obstruir las investigaciones de Lava Jato y de transformar la Cámara en un balcón de negocios.
Cunha es reo ante el STF en dos procesos ligados al esquema de corrupción de Petrobras y en ambos casos fue señalado como receptor de coimas por un monto superior a los 10 millones de dólares; dineros que se presume fueron a dar a sus cuentas en Suiza, cuya existencia confirmó la justicia de ese país.
También pesan sobre él cargos de lavado de dinero, desvío de recursos públicos y evasión fiscal, además de ser blanco de por lo menos otras seis investigaciones por corrupción.
Senador Farías (PT): Si habla el gobierno de Temer cae
Si el arrestado exparlamentario brasileño Eduardo Cunha habla “no deja piedra sobre piedra en el gobierno de Michel Temer y sus ministros”, sostuvo ayer el senador del Partido de los Trabajadores (PT) Lindbergh Farías.
“Demoró, mas salió”, posteó en las redes sociales el legislador petista refiriéndose a la orden de prisión preventiva librada por el juez federal encargado de la operación Lava Jato, Sergio Moro, contra “el operador del golpe y lobista que comandó la farsa de la destitución de (la expresidenta) Dilma (Rousseff)”, escribió.
Farías llamó la atención en otro post sobre el hecho de que la detención se produjera sin cobertura en vivo de la televisión, y dijo esperar que esto “no sea una cortina de humo para voltear las baterías contra la izquierda”. El legislador añadió que no hay expectativas sobre los verdaderos objetivos de Moro; “pero es un alivio que Cunha fuera preso”, remarcó.
Por su parte, el líder del partido Demócratas (DEM) en la Cámara de Diputados, Pauderney Avelino, consideró que “la prisión de Cunha abre el camino para la prisión de Lula”.
Al cierre de esta edición se pudo conocer por medios locales brasileños que el presidente Michel Temer adelantó su regreso de Japón (donde se encontraba de gira oficial) luego de conocer la noticia de la detención de Cunha, y añaden que nadie quiere comentar nada al respecto en el Palacio de Planalto, sede del Gobierno.
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Suiza envía información
La Justicia suiza autorizó el envío a las autoridades brasileñas de más de dos mil páginas de extractos bancarios y órdenes de pago relacionadas con la implicación de la empresa constructora Odebrecht en la trama de corrupción destapada en la Operación Lava Jato, refiere Ria Novosti. La decisión fue obstaculizada durante meses por los abogados de la empresa, pero tras varios recursos la Corte Federal de Lausana dictaminó una sentencia definitiva que no acepta más recursos. Los documentos ofrecerían nuevas pruebas contra el expresidente de la empresa, Marcelo Odebrecht —ya detenido y condenado— y contra otra decena de personas aún no implicadas.
El informe con datos bancarios que aporta Suiza contiene evidencias sobre la existencia de varias empresas fachada que los dirigentes de Odebrecht presuntamente utilizaban para pagar los sobornos. A partir de ahora el juez Sergio Moro, que instruye el caso en la Justicia ordinaria de Curitiba, podrá hacer uso de estos documentos.
CIUDAD CCS
FOTO XINHUA
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