Uno de los objetivo tácticos de la agenda insurreccional contra Venezuela, en su dimensión institucional, se centra en la figura de Tarek William Saab, Defensor del Pueblo.
Tarek es la llave que el plan de las ONGs locales, financiadas casi todas por el Departamento de Estado de EEUU y otros actores externos, buscan hacer torcer para acelerar la fase de implosión político-institucional del Estado venezolano.
Los ultimátum, las horas cero y cronómetros regresivos instalados en la opinión pública para aumentar la presión en su contra, develan el verdero objetivo estratégico de todo el plan, su propia acumulación de actores y factores disruptivos y la conflagración en marcha para producir un reseteo político e institucional que permita empezar a demoler todo el andamiaje del Estado venezolano, basado en la Constitución de 1999.
Tarek es la representación física de ese Estado que quieren socavar con todos los recursos sucios posibles.
Porque esta guerra también tiene como campo de batalla los territorios simbólicos, los signos que marcan la historia chavista y sus referentes éticos más sólidos. Cuando quienes encabezan esta arremetida contra Tarek dicen que el problema es "el modelo" y que él debería ayudar a desmontarlo, no se están refiriendo a otro cosa que no sea el intento de vaciar la memoria del país chavista, distanciarlo de los momentos e referentes que han marcado su existencia como fuerza política.
Tres puntos claves son necesarios de analizar para comprender que está detrás de esta nueva fase de ataque contra la Defensoría.
1. Invasión de la intimidad: una operación de guerra sucia
En la progresión de ataques la carta leída por su hijo mayor Yabrim Saab Fornino representa uno de los recursos más sensibles utilizados. Quizás el mejor que tenían en inventario. El no poder quebrarlo moralmente y rápido por la vía mediática e institucional, aceleró también su pronto uso como arma de guerra sucia y extorsión afectiva.
La utilización del círculo íntimo familiar y de los lazos afectivos construidos a lo interno para ablandar y quebrar políticamente a un dirigente político, es una operación clásica de servicios de inteligencia, con varios antecendentes que establecen sus coordenadas operativas y uso en contextos de conflicto similares, donde determinadas figuras se vuelven claves para determinar el repligue o avance en alguna de sus fases.
Un caso más que demostrativo de estos recursos de guerra sucia es el de Juanita Castro, hermana de Fidel, quien según sus propias palabras fue reclutada por la CIA para que operara en contra de la revolución cubana. Este reclutamiento fue realizado dentro de la isla cuando aún formaba parte del circulo íntimo de Fidel y Raúl Castro. Fue utilizada para encubrir sus actividades contra la revolución hasta que fue descubierta por los organismos de inteligencia cubanos. Tiempo después salió de la isla con ayuda de la CIA y emitió su primer pronunciamiento acusando a "Fidel de traicionar a su patria con falsas promesas" en las Naciones Unidas en 1964
Sin embargo, este no es el único caso. Recientemente también se encuentran los pronunciamientos contra el presidente sirio, Bashar Al Assad, por parte de su amigo de la infancia, el general Manaf Tlass. Inmediatamente después de sus declaraciones en contra del presidente explotó la insurrección armada en la nación árabe.
En este sentido la carta de Yabrim adquiere estos ribetes de operación psicológica, en un contexto donde la satanización de la figura de Tarek no ha hecho otra cosa que escalar. Más si hablamos de un jóven afiliado a la agenda opositora y asimilado por el discurso antigubernamental. Esta operación no tiene como centro su cualidad funcionario, sino su entramado emocional y psicológico.
Tarek, contra la marea y la ansiedad de los medios, respondió con altura refiriéndose con respeto y afecto hacia a su hijo. Todo lo contrario a lo que esperaban quienes capitalizaron políticamente la carta.
2. La campaña contra Tarek: actores y la operación psicológica en curso
Ha sido evidente el papel de las ONGs financiadas por poderes extranjeros como (caso Provea) como canalizadoras de la presión ejercida contra las instituciones del Estado, y en específico contra Tarek.
Las ONGs como recursos de guerra híbrida y no convencional se han destacado, precisamente, por establecer "agendas de influencia" y dirigir "tenazas psicológicas" contra líderes nacionales: base fundamental para el socavamiento de un Estado-nación o para la concreción de un golpe de Estado en su defecto.
El investigador Vladimir Plav, quien escribe para el portal South Front, describeque para este objetivo las ONGs buscan “influir en la opinión pública, organizar protestas masivas y coordinar actividades anti-gubernamentales”, en el marco de establecer la presión psicológica necesaria para ablandar líderes.
Por ende las movilizaciones opositoras convocadas para llegar a la Defensoría para entregar "un documento" no tienen ese fin como objetivo, sino en el marco de esta estrategia de aumentar la presión psicológica. La Defensoría informó que ya ha recibido cinco "cartas" por parte de quienes exigen que sean recibidas
Aunque Plav especifica que en el marco de estas operaciones psicológicas contra el país objetivo vinculan actores más allá de las ONGs (organizaciones empresariales, delincuencia organizada, organismos multilaterales etc.), recalca, con especial énfasis, que lo que él llama “la presión desde arriba” (ubicada en el gobierno) comporta los siguientes elementos de infiltración y uso de personas ligadas al entorno íntimo de los dirigentes atacados: "Los líderes de los gobiernos objetivo están inundados de información falsa sobre los acontecimientos que se están desarrollando, con información procedente de fuentes confiables y cercanas incluyendo incluso parientes y buenos amigos". Los casos reseñados en Cuba y Siria exponen el formato aplicado contra Venezuela y sus hombres de Estado, supeditadas a la agande general de socavamiento institucional y golpe de Estado por la vía insurreccional.
3. Conexiones y vínculos de la madre de Yabrim
Un reportaje realizado por el portal La Tabla, develó que Yabrim Saab Fornino es hijo de “la abogada Francis Josefina Fornino Benítez, hija de un acaudalado constructor de origen italiano, Giovanni Fornino Arnone, nacido en 1933".
Aparte de las actividades, propiedades y el perfil de negocios naturales a una persona de este estatus social de clase alta, hay un dato que resalta en qué meollos político-legales ha estado involucrada y que pueden constituir la base de presión para que Yabrim diera el paso adelante.
En el año 2000 Gabriel Jiménez Aray (ex esposo de Francis Fornino) junto a Ricardo Koesling, representaron a Juan Alvaro Rosabal, un supuesto agente de la inteligencia cubana, quien ofreció una rueda de prensa para denunciar actuaciones irregulares en el país. Asimismo hay publicaciones que lo señalan de haber participado en el intento de asalto a la embajada de Cuba en Caracas, durante el fallido golpe de Estado de 2002, que alejó brevemente del poder al presidente Hugo Chávez.
Apunta el reportaje que "Jiménez está siendo procesado por las autoridades dominicanas por el caso de la quiebra fraudulenta del Banco Peravia en 2015 junto con el empresario aragueño José Luis Santoro". Actualmente sobre Jiménez reposa una alerta roja de Interpol.
Yabrim además estudia en la Universidad Monteávila (dirigida por fracciones conservadoras de la iglesia católica, afiliadas a la agenda del golpe) y es alumno de Juan Miguel Matheus, dirigente y diputado por Primero Justicia. Datos que describenla línea política e ideológica que componen la conducta de Yabrim y el contenido de su carta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario