Isaac González D.
Cortesía
Lejos de ser un espacio de encuentro donde familiares visitan a sus seres queridos que ya no están, el cementerio Corazón de Jesús, de Maracaibo, parece ser la reconstrucción de una película de terror. Los constantes robos, profanaciones y la desidia en el cuidado de las instalaciones han alejado día tras día más a los visitantes.
Matas caídas, basura y hasta tumbas sacadas de sus lugares pueden ser vistas por los visitantes cuando llegan al sitio los cuales, además, les impiden poder transitar de forma normal por las instalaciones.
Isabel González, tiene más de un mes yendo el camposanto para visitar la tumba de su primo y denunció con tristeza, a través de nuestro servicio de whatsapp (0412.6061404), el estado de putrefacción y abandono en el que se encuentra el recinto.
“Tengo un mes visitando el cementerio, voy los domingos y a veces ni los carros pueden pasar, hay que dar toda una vuelta para poder llegar al lugar donde se encuentra mi primo. Todo está feo, hay matas y basura por todos lados”, aseguró González.
La falta de vigilancia se ha convertido en la mejor aliada de la delincuencia para saquear y al caer la noche queda a merced de los profanadores de tumbas.
El año pasado PANORAMA hizo un recorrido por el viejo campo santo donde se contabilizaron 88 osarios con las tapas destruidas que dejaba ver las osamentas dispersas dentro y fuera del nicho. También pudieron observarse el saqueo de muchas tumbas a las que les han quitado lápidas, mármol, rejas y todo cuanto objeto de valor contenga.
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