Santa Lucía, 29 Sep. AVN.- Este martes 30 de septiembre una delegación de trabajadores de la empresa estadounidense Clorox de Venezuela se reunirá con representantes de la Inspectoría Nacional del Trabajo en la ciudad de Caracas.
En la reunión se harán revisiones de las reivindicaciones salariales contempladas en el contrato colectivo vigente en la empresa, del cálculo de las prestaciones sociales y del pago del bono de alimentación pendiente.
En entrevista a la AVN, Luis Piñango, vocero de los trabajadores, informó que este lunes parte de los miembros de la junta administradora provisional de la empresa se reunió en la sede de Clorox en Caracas para analizar las acciones a emprender esta semana.
Allí se planteó que la directiva de la empresa sea designada por los trabajadores de las plantas y se evaluó el apoyo que ofrecerá el Gobierno Bolivariano para reanudar el funcionamiento de las plantas de Santa Lucía (Miranda) y Guacara (estado Carabobo).
Dijo que desde el fin de semana los trabajadores de ambas plantas iniciaron los inventarios respectivos para verificar la cantidad de materia prima, bienes muebles, productos almacenados, deudas con proveedores, y deudas con el personal.
De materia prima, la planta de Santa Lucía cuenta con cantidad suficiente para producir un mes y medio, según informó Piñango, y añadió que en los próximos días el Ministerio del Poder Popular para el Proceso Social del Trabajo definirá cuándo se instalará la junta administradora y cuándo se entrará en funcionamiento la empresa.
La planta de Santa Lucía cuenta con tres galpones: dos de producción, uno de lana (esponjas jabonosas) y otro de desinfectantes líquidos (Mistolín) y blanqueador en polvo (Nevex); y un galpón de acopio que almacena la producción local y de cloro de la planta de Guacara.
Piñango aseguró que pronto, con el apoyo del Ejecutivo nacional, los trabajadores reiniciarán la producción y distribución de los productos de limpieza que necesita la población venezolana.
Renace la esperanza
Edgar Beltrán, trabajador del área de logística en Almacén, comentó que el hecho de que el Gobierno nacional tomara parte de la lucha que emprendieron los trabajadores de Clorox les devolvió la esperanza de contar con sus puestos de trabajo.
"Estaba de vacaciones cuando me sorprendió la noticia del cierre de la empresa, pensé que era una decisión temporal. Me sentía desmoralizado, frustrado y lloré de impotencia e incertidumbre por el futuro de mis hijos", acotó.
Yuleima Garate, quien se desempeña desde hace 18 años como operadora de maquinarias, expresó que se enteró del cierre por una pancarta que colocaron los dueños de la empresa en el portón de la planta de Santa Lucía.
"Los dueños de clorox nos dejaron en el aire a todos, jamás nos imaginamos que harían esto; pero hoy es un hecho que el Gobierno nacional apoyará la reactivación de la empresa y eso nos devolvió la tranquilidad y la seguridad que podremos sacar adelante esta fábrica", agregó.
Yahirsiño Jiménez, con 14 años de servicio en el área de producción, fue otro de los trabajadores afectados por el cierre inesperado de la planta.
"La incertidumbre de pensar que estaba en peligro el sustento de nuestras familias nos impulsó a luchar por la recuperación de la empresa. No hemos perdido la fe y el entusiasmo de reanudar el funcionamiento de las plantas porque el gobierno nos apoya".
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