Murió Nerio Fuenmayor, pionero del desarrollo urbanístico marabino

Janeth Gutiérrez

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El gremio empresarial zuliano está de luto ante la noticia del fallecimiento del reconocido hombre del sector construcción Nerio Fuenmayor Bravo, pionero del desarrollo urbanístico de la ciudad de Maracaibo. El empresario murió el pasado 4 de septiembre en Miami (Florida, EE UU) a causa de una enfermedad terminal.

Desde muy temprana edad, Fuenmayor Bravo mostró su condición innata para continuar la labor emprendedora de su progenitor, Luis Emiro Fuenmayor. Con apenas 21 años de edad, a su regreso de los estudios de contabilidad en el exterior, se empeñó en redimensionar la pequeña alfarería de su padre promoviendo la actividad alfarera que poco después concluyó en la actual Alfarería y Cerámicas del Caribe, empresa calificada como líder en Latinoamérica en el ramo de alfarería durante los años 60.

Su amigo el doctor Honorio Castejón, quien lamentó la pérdida, recordó a Fuenmayor como un pionero en la construcción de viviendas. Con la creación de la empresa Construcciones Unión (Cusa), impulsó la ejecución de viviendas unifamiliares y multifamiliares para la clase media y personas de bajos ingresos.

La actividad en dicho ramo resultó tan profusa que la empresa pudo considerarse como precursora del desarrollo habitacional masivo por parte del sector privado en la ciudad de Maracaibo.  Su acierto en el manejo de los negocios y su extraordinaria visión futurista lo hicieron acreedor como miembro principal de la junta directiva del Banco de Fomento Regional Zulia”, refirió Castejón.

Años después, invitado por Esteban Pineda Belloso, el empresario promovió junto a él la constitución de Cementos Catatumbo,  con el fin de participar en el auge y desarrollo de la actividad cementera del país.

Hasta el momento de su muerte, el marabino ejerció la vicepresidencia de la junta directiva de Cementos Catatumbo C.A y la presidencia de la empresa matriz Inversiones y Proyectos Catatumbo (Inprocasa). 
“En el ámbito de la economía regional su muerte  deja un vacío más en esa generación sobre cuyos hombros ha cabalgado la zulianidad desde la mitad del siglo pasado. Su bohonomía, su amistad sincera y su responsabilidad personal enluta gravemente el hogar de su familia y de sus amigos”, expresó Castejón.