alejandro bracho // panored@panodi.com
La acción de los llamados ‘Piratas’ del Lago” vuelve a enlutar a familias de pescadores. Ahora asesinaron con disparos a dos trabajadores, mientras que otros dos están desaparecidos.
Funcionarios de Polisur Lacustre, mediante labores de patrullaje, fueron quienes observaron dos cuerpos flotando, ya en descomposición pero con heridas visibles de arma de fuego, a tres millas del Malecón de Maracaibo en el canal de navegación.
Los cadáveres fueron llevados a las orillas de la plaza Bolívar de San Francisco donde se esperaba la llegada de forenses del Cicpc para la identificación de los cuerpos.
En el Malecón estaba el encargado de la pescadería Marimar, ubicada en el sector La Ensenada de La Cañada. Él vio partir a cuatro trabajadores de la pesca, la tarde del miércoles, y desde ese momento no se supo más de ellos.
Jhony Soto, el encargado de la pescadería, pudo identificar a Álvaro Manoa González Palmar, de 34 años, pero al otro cuerpo no, porque estaba muy descompuesto.
Pasadas las 12:00 del mediodía de ayer, llegó una embarcación a este malecón de San Francisco con varios familiares llorando y gritando.
Se trataba de la tía y otros familiares de Félix José Lozano, el otro hombre encontrado ayer.
“¡Dios mío, no!”, gritaba la mujer. “¡Dejénme verlo, por favor!”, exigía, pero los funcionarios policiales le advertían que no debían acercarse ni mucho menos tocarlos.
Pudieron identificar a Félix por un tatuaje que tenía en su antebrazo derecho que decía: K.D. “¡Eran las iniciales de dos de sus hijas, es él!”, gritaba la tía llorando y en absoluto desconsuelo.
Mientras se calmaban contaron a la policía que “estaba perdido desde el miércoles en la tarde y que era padre de cinco hijas”. Vivía en el sector Las Carmelas del municipio La Cañada de Urdaneta.
Funcionarios de Polisur Lacustre, mediante labores de patrullaje, fueron quienes observaron dos cuerpos flotando, ya en descomposición pero con heridas visibles de arma de fuego, a tres millas del Malecón de Maracaibo en el canal de navegación.
Los cadáveres fueron llevados a las orillas de la plaza Bolívar de San Francisco donde se esperaba la llegada de forenses del Cicpc para la identificación de los cuerpos.
En el Malecón estaba el encargado de la pescadería Marimar, ubicada en el sector La Ensenada de La Cañada. Él vio partir a cuatro trabajadores de la pesca, la tarde del miércoles, y desde ese momento no se supo más de ellos.
Jhony Soto, el encargado de la pescadería, pudo identificar a Álvaro Manoa González Palmar, de 34 años, pero al otro cuerpo no, porque estaba muy descompuesto.
Pasadas las 12:00 del mediodía de ayer, llegó una embarcación a este malecón de San Francisco con varios familiares llorando y gritando.
Se trataba de la tía y otros familiares de Félix José Lozano, el otro hombre encontrado ayer.
“¡Dios mío, no!”, gritaba la mujer. “¡Dejénme verlo, por favor!”, exigía, pero los funcionarios policiales le advertían que no debían acercarse ni mucho menos tocarlos.
Pudieron identificar a Félix por un tatuaje que tenía en su antebrazo derecho que decía: K.D. “¡Eran las iniciales de dos de sus hijas, es él!”, gritaba la tía llorando y en absoluto desconsuelo.
Mientras se calmaban contaron a la policía que “estaba perdido desde el miércoles en la tarde y que era padre de cinco hijas”. Vivía en el sector Las Carmelas del municipio La Cañada de Urdaneta.
Los otros dos pescadores desaparecidos son Manuel Garcia y Germán Mendoza, de quienes todavía no hay rastros. “Ellos salieron en su embarcación, pero tampoco aparecen”, dijo una fuente policial.
El Cicpc levantó los cuerpos de Lozano y González y los llevó a la morgue, mientras que Polisur Lacustre prosigue la búsqueda de los pescadores en recorridos por las costas de Maracaibo y San Francisco, que podría extenderse a Santa Rita y Miranda.
El sábado pasado, el ministro de Interior y Justicia M/G Néstor Reverol, anunció el relanzamiento de los cuadrantes lacustres.
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