lunes, 19 de junio de 2017

Constituyente, justicia para la participación política de la mujer.


ENFOQUE UNAMACI
Carmen Hernàndez

“Hombres, sus derechos y nada más;
mujeres, sus derechos y nada menos…”
Susan B. Anthony (1829-1906)
Luchadora social estadounidense.


                Olympia de Gouges, fue una escritora francesa que reivindicó la igualdad de derechos entre hombres y mujeres en el marco de la Revolución Francesa, En 1791 apoyada por otras mujeres conscientes de la discriminación de la época, redactaron la  declaración de  los Derechos de las Mujeres como Ciudadanas. Tan arriesgada idea  no tuvo éxito y de Gouges  terminó en la guillotina, en 1793. Sin embargo, sus aportes se convirtieron es una importante  referencia para la historia del feminismo. 
Esa Declaración  avivó  el espíritu de la filósofa inglesa   Mary Wollstonecraft  quien en 1792 escribió la Vindicación de los derechos de la mujer. En su obra defendía el derecho a la educación de las mujeres y a recibirla en igualdad de  condiciones que los hombres. Además de los derechos cívicos y políticos. La negación al derecho a  la instrucción era  una de las razones por las cuales la mujer no podía acceder a la vida política.

En el siglo XVIII los movimientos de mujeres reivindicaron el derecho a la educación, el derecho al trabajo, los derechos matrimoniales y el derecho al voto.  A este siglo se le denomina "la primera ola" del feminismo.
La segunda ola del feminismo comenzó en el siglo XIX y finalizó a mediados del siglo XX. Uno de sus objetivos principales fue el derecho al voto, llevada a cabo por las sufragistas. Wyoming se convirtió en el primer estado de los EEUU que reconoció el voto a las mujeres. El primer país en aprobar el sufragio para la mujer fue Nueva Zelanda en 1893.
En América Latina, el primer reconocimiento del derecho al sufragio para las mujeres se estableció en Ecuador en 1929, seguido un año después por Chile y dos años después por Uruguay.
La mujer venezolana con su espíritu indómito de resistencia heredado de las heroínas indígenas e independentistas,  emprendió años de lucha por la conquista de sus derechos y  espacios de participación; ante la discriminación política de la época, donde el  patriarcado la mantenía  en la domesticidad del hogar.
Las venezolanas obtienen su derecho al voto por primera vez,  el 27 de octubre de 1946 en el marco de una Asamblea Nacional Constituyente, donde fueron elegidas 12 mujeres como integrantes de dicha asamblea.
Esa Constituyente fue definitoria y consagró el derecho al  voto directo, secreto y universal a   las venezolanas. El 14 de diciembre de 1947.
Hermosa conquista
La Asamblea Nacional Constituyente de 1999, dio lugar a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela. En ella  quedó visibilizada por primera vez,  la mujer venezolana.
La equidad de género transversaliza todo el texto constitucional y  rompe con los parámetros tradicionales. Las hace coprotagonistas de los cambios sociales como ciudadanas de plenos derechos y deberes. Sin duda, es una hermosa conquista de la mujer venezolana.
Paridad con alternabilidad  
Los esfuerzos que se han desarrollado en Venezuela a favor de la paridad no han tenido éxito.  Las mujeres exigen mayor participación. La paridad del 50/50 debe ser una norma de obligatorio cumplimiento por parte de las organizaciones políticas.
La paridad del 50/50, en las listas paritarias y alternas por género, es un mecanismo justo, eficiente e inmune a los sesgos masculinos, tan común en los partidos políticos.

 La participación política exige una conciencia militante feminista no patriarcal ni androcéntrica. El  camino es largo y aún falta mucho  por transitar. La Asamblea Nacional Constituyente 2017, abre  el  camino de la justicia para profundizar los derechos y la participación política de la mujer. ! Participemos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario