G. Núñez
Cortesía
Asalto millonario: quinientas (500) tablets tipo ‘Canaimas’ fueron robadas de Ipostel Maracaibo, la mañana del pasado domingo 19 de mayo.
En tiempo récord, los equipos electrónicos fueron recuperados.
Cuatro hampones ingresaron de manera sigilosa a las instalaciones, en la avenida El Milagro, y con sus armas de fuego sometieron al personal.
Los cuatro delincuentes amordazaron y maniataron al grupo. Tras inmovilizar a las personas, estuvieron durante dos horas en el edificio hasta robar las 500 ‘Canaimas’, valoradas en 400 dólares cada una. También cargaron con otras computadoras y CPU.
Con las tablets, los hampones huyeron en un carro Fairlane 500, marrón.
Uno de los trabajadores pudo zafarse y ayudar al resto de sus compañeros.
El robo fue notificado a las autoridades del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, quienes iniciaron las investigaciones al respecto, dando como autor principal un exempleado de Ipostel. Otro de los involucrados es vigilante de la sede.
El caso fue informado, la mañana de este miércoles 22 de mayo, en rueda de prensa por el comisario Mario Pacheco, director de la policía científica en el Zulia.
Afirmó que están detenidos tres de los cuatro hampones. Cayeron la tarde del martes 21 de mayo, en una casa ubicada en el sector Las Mercedes, parroquia Olegario Villalobos, al norte de Maracaibo.
En la misma vivienda el Cicpc encontró las 500 'Canaimas".
“Funcionarios de este despacho realizando las investigaciones pertinentes del caso realizaron la detención de tres delincuentes que incurrieron en el robo de la empresa Ipostel, siendo identificados como Jorge Edixon Ortega, de 28 años, Marco Vinicio Andrade y Maryurys Josefina Paredes”, informó Pacheco.
Según el jefe policial, Jorge Ortega era vigilante activo de la empresa y sirvió como enlace para que los delincuentes ingresaran en el momento oportuno.
Un exempleado está involucrado en el robo. El comisario Pacheco lo identificó como Ramón Jesús Ortega Ortega.
“Como cuerpo policial y científico estamos a la orden del pueblo para atender sus necesidades y aún más, cuando el daño afecta a la producción del Estado, pues estas tablets estaban destinadas al sector universitario y de haberse perdido, estuviésemos hablando de una suma de docientos mil dólares”, agregó Pacheco.
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